Un espacio para Caleb
Caleb, pasa a ser parte protagonista de la obra de Dios, y también es el recordatorio para Josué de que no solo él era quién tenía esta misión, de que también Dios tenía a otro joven a su lado con su misma visión y energía.
Normalmente una de las mentiras más grandes que nos comemos los jóvenes es la de que estamos solos, o que aquello que sufrimos y sentimos lo estamos pasando solos, ¡eso no es verdad!, puedes, de hecho, cometer el error de aislarte pero, créeme, no la estás pasando solo.
Y eso sería bueno decírtelo a ti mismo ahora, ponme atención, esto es importante:
¡Hay más jóvenes como tú en esta lucha!, ¡No estás solo en esto!, así como tú estás, hay también otros jóvenes, y la historia no ha cambiado: ¡si hay un Josué entonces debe haber también un Caleb!, es así.